El Blog de Sankalpa Yoga. Ser espiritual.

Hoy quiero reflexionar sobre ese término que cuando se pronuncia, a muchas personas o entidades, se les encienden las alarmas. Es la definición de "ser espiritual".

Muchas personas tienden a pensar que ser una persona espiritual es estar iluminado o elevado sobre el resto del mundo, recluidos en una cueva meditando todo el día, o realizando tareas caritativas como lo hicieron la Madre Teresa de Calcuta y tantas otras personas alrededor del mundo. Desde mi punto de vista algo erróneo.

La definición que el diccionario arroja refiriéndose a una persona, implica habitualmente la intención de experimentar estados especiales de bienestar, a practicar los sentidos de la solidaridad, la empatía y la posibilidad de conectarse con la esencia del ser humano en su sentido más amplio.

Se piensa que si eres espiritual, no puedes estar nervioso, no puedes ser vulnerable, no puedes estar triste y tienes siempre que tener fe y confianza y ser muy positivo.

Pero este tipo de perfección impuesta, es una falacia que se desea vender a los que se consideran espirituales o aquellos que pretendemos serlo.

Pienso que no eres más espiritual por simular ser perfecto y nunca molestarte por nada. Por el contrario, es importante bajar de vez en cuando a "tus infiernos" y enfrentarte a tus "demonios''. Debes dejarlos vivir y ser. Debemos permitirnos estas sombras y sus manifestaciones, siempre que no dañen a los demás, y que no nos perjudique el negarlo. Es importante encontrarte con tus miedos y trascenderlos para poderte encontrar con tu dolor y exteriorizar, llorar y gritar. Debemos aceptar nuestro lado vulnerable, nuestro cansancio, apatía, desánimo, frustración e impotencia.

Para ser espiritual hay que saber perdonar y perdonarse para poder seguir adelante, se debe tratar de ayudar a los demás siempre que sea posible, actuando bajo principios y valores establecidos. Es importante no enfocarse solo en lo material sabiendo que el placer instantáneo no trae la felicidad. Pero no debemos perder ese interés necesario en la vida terrenal y debemos seguir manteniendo curiosidad por el mundo en el que vivimos.

Pero algo que me ha quedado claro en la práctica, es que para llegar a ser espiritual, hay que conocer primero tus sombras y tratar de hacer las paces con todo lo que eres para intentar conocerte mejor. Y una vez hecho esto, podrás comenzar a plantearte el elegir lo que quieres ser.

Me despido hasta el siguiente post, os deseo un feliz descanso estival y por favor que seamos prudentes con la situación de salud global y como no, recordándote que nadie, absolutamente nadie, es dueño de la verdad absoluta. Lo verdaderamente importante es experimentar.